Es el título del libro que me compré ayer en la tarde, en la Librería Nacho, del Centro Comercial Tolón. El título difiere en que la frase no es a modo de pregunta, es decir que se presenta como una especie de manual del cómo llegarle a tamaña empresa. El autor es Luis Chumaceiro, presunto heterónimo de algún articulista o profesor universitario de apellido Alvarez.
Lo cierto e importante es que el libro, que parece estar escrito en clave de jodedera, es una excelente jodedera acerca de las relaciones marido-marida, o esposo-esposa, u hombre-mujer, o como quiera que le quieran llamar al par de términos fatídicos por demás (aunque no me consta, por si las moscas).
Lo hojeé un rato en la librería y varios pasajes me ayudaron a decidirme a comprarlo. Una perlita:
"Hagan la prueba con la primera mujer que se atraviese. Con este libro en la mano, interróguenla: ¿que no le perdonarías a un hombre?
Científicamente está demostrado que el sesenta por ciento (60%) de las mujeres contestarán que no perdonan la mentira. No les crean. Esos entes acostumbrados a usar la inteligencia como contrapeso a la fuerza bruta, les acaban de tender una trampa. La respuesta es una mentira evidente. Las mujeres no toleran la verdad, decirla engendra violencia.
La clave para hacerlos perdonar por sus mujeres, o mejor aún, que nunca los culpen, es eludir, evitar, desplazar violentamente la verdad de cualquiera de sus actuaciones. Mientan siempre, como un atleta que se estrena para participar en las olimpíadas. Practiquen con la propia y con las otras. En todo momento. Cuando estén tentados a decir la verdad, sólo callen. La realidad es que a ninguna mujer le gusta que le digan la verdad.
Se imaginan si cuando se prueba un vestido y pregunta ¿Cariño, como me queda?; uno le contesta: "Pareces un espantapájaros después de la tormenta". O cuando una amante pregunta: ¿Como es la relación con tu esposa?; la respuesta fuera: "Es perfecta. Ella es inteligente, bella, el sueño de todo hombre; yo sólo te tengo a tí para desahogarme, practicar las posiciones que por respeto no puedo practicar con la madre de mis hujos" (...). Considérense hombres muertos en cualquiera de esas situaciones"
Lo cierto e importante es que el libro, que parece estar escrito en clave de jodedera, es una excelente jodedera acerca de las relaciones marido-marida, o esposo-esposa, u hombre-mujer, o como quiera que le quieran llamar al par de términos fatídicos por demás (aunque no me consta, por si las moscas).
Lo hojeé un rato en la librería y varios pasajes me ayudaron a decidirme a comprarlo. Una perlita:
"Hagan la prueba con la primera mujer que se atraviese. Con este libro en la mano, interróguenla: ¿que no le perdonarías a un hombre?
Científicamente está demostrado que el sesenta por ciento (60%) de las mujeres contestarán que no perdonan la mentira. No les crean. Esos entes acostumbrados a usar la inteligencia como contrapeso a la fuerza bruta, les acaban de tender una trampa. La respuesta es una mentira evidente. Las mujeres no toleran la verdad, decirla engendra violencia.
La clave para hacerlos perdonar por sus mujeres, o mejor aún, que nunca los culpen, es eludir, evitar, desplazar violentamente la verdad de cualquiera de sus actuaciones. Mientan siempre, como un atleta que se estrena para participar en las olimpíadas. Practiquen con la propia y con las otras. En todo momento. Cuando estén tentados a decir la verdad, sólo callen. La realidad es que a ninguna mujer le gusta que le digan la verdad.
Se imaginan si cuando se prueba un vestido y pregunta ¿Cariño, como me queda?; uno le contesta: "Pareces un espantapájaros después de la tormenta". O cuando una amante pregunta: ¿Como es la relación con tu esposa?; la respuesta fuera: "Es perfecta. Ella es inteligente, bella, el sueño de todo hombre; yo sólo te tengo a tí para desahogarme, practicar las posiciones que por respeto no puedo practicar con la madre de mis hujos" (...). Considérense hombres muertos en cualquiera de esas situaciones"
Comentarios
En realidad lo que el libro dice no refleja lo que pienso del tema, es sólo que me gustan mucho los libros de humor bien escritos, y éste cae en ese saco.
Acerca de libros similares, pero desde el punto de vista opuesto, hay muchos otros también, y comics (Maitena), y series (Sex in the city) y mucha literatura y derivados mas.
Soy un gran defensor de ambos bandos. Es decir, defiendo fervientemente nuestro gremio machista-leninista (como dice una gran amiga y mentora), pero como me gustan tanto las mujeres, pues las defiendo a Ustedes también. Claro que como no soy muy activo sino mas bien sedentario, pues lo hago desde la comodidad del teclado.
:-D
Saludos!