Ir al contenido principal

No Tan Santo Domingo

Llegué ayer al final de la tarde a Santo Domingo, en un vuelo de Aeropostal que da una -nunca muy breve- parada en Aruba. Dormí bastante, casi todo el trayecto, por lo que no puedo decir si hubo o no turbulencias o rayos o nubarrones o vientos huracanados o sol brillante y resplandeciente o extraterrestres tratando de conquistar el mundo o al menos al avión.

Sí hubo extraterrestres anoche, en la película 'War of the Worlds', de Spielberg. Me acordé de un caso que a mí me pareció cómico en unos comentarios a un post (muy bueno por cierto) de Angel Negro donde reseñaba la película, en el que uno de los bloggers le molestó que otro contara el final. Digo que es cómico pues a veces uno se olvida que pertenece a otra generación y que es posible que hayan personas que no sólo no sepan toda la historia en la que está basada esta película, es decir del libro de H. G. Wells, de la primera versión en blanco y negro, del cuento de Orson Welles y su transmisión de radio que causó un lapsus de histeria colectiva al final de los años 30. En fin que como es una historia muy conocida por quienes nos gusta el género de ciencia-ficción, uno se olvida que los veinteañeros de hoy en día, en especial los no fanáticos del género, puede que vayan al cine con la ilusión de la novedad del tema. En ese sentido es cierto, hay que respetar a todos por igual.

Para quienes quieran profundizar en el tema, hay un sitio (en inglés) que ha recogido mucha información del tema: War-of-the-worlds.org.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Guía rápida para pasar como un experto en vinos

Hace poco leí un artículo con este título en un diario gringo en línea y pensé que podría escribirle a mis panas locales una guía similar, tomando ideas de ese texto, intentando no copiar descaradamente, y adaptando un poco el tema a nuestro mercado, aunque quizás funcione también para otros países vecinos. Acá van entonces algunos consejos para que cualquiera de Ustedes pueda parecer y sonar como todo un experto en vinos, claro que es importante ponerlos en práctica cuando uno se encuentre en compañía de colegas, amistades o familiares, que eso de tratar de convencerse a uno mismo no parece ser muy útil. Compra vinos –o recomienda comprarlos– en bodegones o supermercados de alto nivel. Justifica los precios mayores con aquello de que en esos sitios las botellas tienen mayor rotación, pues la gente de dinero toma más vino que güisqui dieciocho años. Llama siempre cepas a las uvas. Es exactamente lo mismo, pero te hace parecer un conocedor.

Fast track: SDQ-SJU-SDQ

Vuelo de nuevo ida por vuelta a San Juan desde Santo Domingo. ¡Que santas suenan estas ciudades! Santo, Santo, Santo es el Señor. El Domingo regresé casi a medianoche a Santo Domingo sin mucho problema, sólo lamentando no haber tenido tiempo de comprar un juego de copas Riedel que bastante falta me hacen, pues las copas de cristal para vino tienen la mala costumbre de quebrarse con frecuencia. Una copa Riedel cuesta en Caracas aproximadamente $30,00 (treinta dólares americanos), una sola copa, repito. En cambio en nuestro hermano norteño, tan denigradito él por estos días, un juego de cuatro copas de la misma marca y sabor cuesta unos cuarenta pedruscos similares ($40,00). Cuatro copas completicas con base y todo. ¿Las ventajas del mercado de oferta y demanda? Igual creo que la semana que viene me toca otro vuelo fugaz y contaré con más dinero, quizás entonces pueda darme el pequeño lujo.