Ir al contenido principal

Lau Lau ahumado

Prueba unas lonjas, estilo Carpaccio, de un exquisito Lau Lau ahumado, ya especiado, que me ha regalado un gran amigo que, no conforme con tamaña muestra de amistad, me lo ha traído directo desde Puerto Ordaz, donde vive y de donde es originario este insgine plato de la gastronomía venezolana.

Se me ha ocurrido abrir una botella de algún buen vino para acompañar este aromático plato. Lamentablemente la botella de Casal Mendes Vinho Verde, que tenía abierta desde hacía muchas semanas ya, no ha aguantado tanto y estaba avinagrada. Dilcia me dice 'a la nevera, que ya cocinaré con lo que queda', ni modo.

Busco entre las botellas que tengo en mi pequeña vinera y me atrae un Trivento Reserva 2007, de la cepa Bonarda que no conozco bien, pero que tiene fama de ser una uva que da vinos afrutados y bien perfumados. Esta cepa es originaria de Italia, pero según lo que he leído, ha sido una preferencia de los argentinos por muchas décadas, y al parecer ya se da bien en este país. Al probar este reserva, se notan los aromas frutales con la madera que le ha dado mayor cuerpo y estructura. No se presenta tan aromático como esperaba, pero quizás sea por otra razón.

Como imaginé, el ahumado del Lau Lau, muy pronunciado en este caso (lo he probado mas suave en algún restaurant de Puerto Ordaz) supera con mucho los aromas del tinto, pero no impide que sus sabores se muestren un poco, si bien tímidos ante tanta intensidad.

Al final de cuentas terminé disfrutando mucho con esta cena. Se me ocurren otras ideas que comentar, pero algunas tristes y otras que darían para reflexiones más sesudas y que no vienen al caso, en un domingo tan tranquilo y apacible como ha sido este que ya está terminando.

Buscaré, otro día, un plato que maride mejor con esta botella.

Amanecerá y veremos.

Entradas más populares de este blog

Guía rápida para pasar como un experto en vinos

Hace poco leí un artículo con este título en un diario gringo en línea y pensé que podría escribirle a mis panas locales una guía similar, tomando ideas de ese texto, intentando no copiar descaradamente, y adaptando un poco el tema a nuestro mercado, aunque quizás funcione también para otros países vecinos. Acá van entonces algunos consejos para que cualquiera de Ustedes pueda parecer y sonar como todo un experto en vinos, claro que es importante ponerlos en práctica cuando uno se encuentre en compañía de colegas, amistades o familiares, que eso de tratar de convencerse a uno mismo no parece ser muy útil. Compra vinos –o recomienda comprarlos– en bodegones o supermercados de alto nivel. Justifica los precios mayores con aquello de que en esos sitios las botellas tienen mayor rotación, pues la gente de dinero toma más vino que güisqui dieciocho años. Llama siempre cepas a las uvas. Es exactamente lo mismo, pero te hace parecer un conocedor.

Fast track: SDQ-SJU-SDQ

Vuelo de nuevo ida por vuelta a San Juan desde Santo Domingo. ¡Que santas suenan estas ciudades! Santo, Santo, Santo es el Señor. El Domingo regresé casi a medianoche a Santo Domingo sin mucho problema, sólo lamentando no haber tenido tiempo de comprar un juego de copas Riedel que bastante falta me hacen, pues las copas de cristal para vino tienen la mala costumbre de quebrarse con frecuencia. Una copa Riedel cuesta en Caracas aproximadamente $30,00 (treinta dólares americanos), una sola copa, repito. En cambio en nuestro hermano norteño, tan denigradito él por estos días, un juego de cuatro copas de la misma marca y sabor cuesta unos cuarenta pedruscos similares ($40,00). Cuatro copas completicas con base y todo. ¿Las ventajas del mercado de oferta y demanda? Igual creo que la semana que viene me toca otro vuelo fugaz y contaré con más dinero, quizás entonces pueda darme el pequeño lujo.