The Town of San Felipe...

Google ha liberado hace algunos días su versión de la Biblioteca de Alejandría: Google Books, un buscador de palabras dentro de los millones de libros en decenas de idiomas que ha digitalizado, y que por supuesto ha despertado la polémica en las cabezas más conservadoras de aquellos que regentan editoriales alrededor del planeta. Ahora, hace unos pocos días, ha abierto la posibilidad de bajar copias en PDF a nuestro propio disco duro para leerlo cuando uno lo desee, claro que solamente de aquellos libros que ya no tienen (por antiguos o por permiso de editoriales asociadas) derechos de autor. Una pequeña muestra (sólo que en su idioma original) es el Inferno de Dante, al que basta "apretar" el botón que reza "Scarica" para que el libro completo en cuestión nos pertenezca como si lo hubiésemos ido a buscar en una oscura librería de viejo de alguno de los suburbios de Roma, pues pa' completar, se han escaneado muchísimos libros antiguos, raros ejemplares que no vamos a poder conseguir ni en sueños en cualquier librería de los Sambil o cualquier otro mall del país.



Curioseando y colocando palabras clave en el buscador a ver qué conseguía de por estos lados, me encontré algunos títulos interesantes:

The Town of San Felipe and Colonial Cacao Economies; de Eugenio Piñero. 1994.



Geografia general para el uso de la Juventud de Venezuela; Tomo No. 4. 1837.



Constitución del Estado de Venezuela. 1830.



Resúmen de la historia de Venezuela; Rafael María Baralt. 1841.



Ensayo político sobre la isla de Cuba; Alexander von Humboldt. 1827.



Historia de Méjico desde los primeros movimientos que prepararon su independencia en el año de 1808 hasta la época presente; Lucas Alamán. 1850.



Real compañia guipuzcoana de Caracas, noticias historiales practicas(...); Real compañia Guipuzcoana de Caracas. 1765.



Juicio critico de algunos poetas Hispano-americanos; Miguel Luis Amunátegui, Gregorio Víctor Amunátegui Aldunate. 1859.

Debe haber miles de libros cada uno más interesante que el otro. Pero ya me dió sueño.



Amanecerá y veremos.