Figuraduras

La tecnologia sigue siendo una de mis grandes pasiones. Estoy sentado en el asiento 30D (bien al fondo) de un Airbus A-321 esperando que terminen de acomodarse todos los pasajero para que den la orden de despegue, y este elefante volador pueda llevarme a Lima finalmente. Escribo esto desde mi telefono celular (al que aun no descubro como sacarle los acentos) conectado a la version mobil del email de Yahoo, todo esto con bastante comodidad (exceptuando el asiento, claro). Se que las tecno-novedades seguiran llegando para hacernos la vida mas sencilla, a todos sin excepcion. Aunque estoy consciente que para eso debemos ir disminuyendo el egocentrismo que generan ciertas sociedades. Amanecera y veremos.

Me puse a jugar con el programita llamado Poster Forge , hecho para crear esos posters "motivacionales" que vemos en muchas empresas (en especial de tecnología) para inspirar a la gente. Hice mi propia versión de algunos posters usando fotos de Flickr y frases que me gustan.

De unas fotos que tomé hace tiempo ya, en el Viejo San Juan.

El gadget de moda en esta temporada son los discos duros externos, aparatejos que se han hecho muy deseados debido a la inmensa cantidad de basura información digital que generamos inclusive en nuestros propios hogares, contando desde fotos de cámaras digitales, fotos de las pseudo-cámaras de los celulares, la colección de cedés eme-pe-tri-zados que se van acumulando en el directorio "mi música", los videos terribles de aficionado tomados con las mismas cámaras fotográficas o con las nuevas cámaras de video digital, o con los benditos celulares, documentos del trabajo, documentos de tareas de los chamos, en fin, paremos de contar que ya cualquiera debe estarse imaginando unos tres o diez ejemplos más (sean unos más "legales" que otros, que para el tema da igual). Los precios acá en Venezuela, o en otros países latinoamericanos no los he revisado mucho, pues me enfoco principalmente en revisar las revistas gringas que se especializan en el tema, como las ya clásica

Hoy sigo con una gripe terrible, que me tiene algo afónico, lo cual no ha sido nada bueno para el adiestramiento que he estado dictando desde la semana pasada, una tos insufrible y varios síntomas de similar parentesco y de igual o peor molestia. Tuve una conferencia con unos potenciales aliados de negocios en República Dominicana. Tengo que planear una visita a Santo Domingo. Me gustaría volver a disfrutar del mofongo con sancocho del restaurant Adrián Tropical, el que queda en el malecón. Que vaina tan buena. Con una Presidente bien fría, por supuesto. El sábado pasado la abuela de D. cumplió 99 años. No pude ir por apuros de trabajo, pero me contó que le llevaron un mariachi que no pudo cantar algunas de las canciones que ella le pidió. Quizás los recuerdos de las canciones de hace cincuenta o sesenta años fueron demasiado para los chamos que amenizaron la reunión. Ni modo. Felicidades, abuela! La semana que viene debo ir a Lima de nuevo. Que se preparen los tiraditos, los ceviches

Mientras espero que baje la última versión de Ubuntu que he decidido finalmente probar, cojo un libro, el más delgado que veo, de mi pequeña biblioteca, para leer un rato. Es "Los Cazadores de focas de la bahia de Baffin", de Emilio Salgari. Me llegan recuerdos de la infancia y los primeros libros que leí. ¿Será que lo termino? Amanecerá y veremos.